Con motivo del día mundial de la mujer he decidido aprovechar para reflexionar sobre la situación de la mujer en el mundo de la arquitectura. Mujer y Arquitectura. ¿Es la Arquitectura un mundo de hombres?
No es la primera vez que toco el tema en el blog de Arquiknowmadas.
Pero en esta ocasión no quería aportar únicamente mi visión.
Quería aportar una visión variada y coral… con la perspectiva de muchas… todas aquellas que se animaran a participar…
Espero que nuestra aportación ayude a concienciar y visibilizar el trabajo de todas, no sólo las que están, sino el trabajo anónimo de muchas y grandes profesionales del sector.
Desde aquí, además, quiero dar mi más sincero agradecimiento a todas vosotras, maravillosas mujeres con las que trato a diario, y que con vuestro tiempo y dedicación habéis contribuido sumar…
¡Gracias de corazón!
Paula.
“E que eu o que quería era falar con arquitecto”
(Es que yo lo que quería era hablar con el arquitecto)
Esto me comentó, unos meses después de terminada la carrera de arquitectura un cliente en la puerta del estudio.
Este recuerdo llevaba muchos años enterrado en mi mente… afloró hace unos días mientras recopilaba información y gestaba la idea del artículo que sale a la luz hoy.
¿Por qué empiezo el artículo de hoy en Arquiknowmadas con esta frase?
Pues primero de todo como reflexión personal.
Siempre he considerado que era una mujer afortunada porque nunca se me había discriminado a nivel profesional por el hecho de ser mujer…
He tenido el privilegio de trabajar en un colegio profesional en el que la nómina de final de mes no distinguía entre sexos.
Inicié mi carrera como profesional liberal apenas unos días después de finalizar la carrera…
Nunca me han regateado por mis servicios por el hecho de ser mujer, ni me han ofrecido un sueldo más bajo por esta cuestión.
Siempre me he considerado una afortunada, de verdad.
Hasta que llegó un día hace no mucho tiempo en que esta visión cambió.
Participé en mi ciudad, Pontevedra, en un evento llamado mujeres imparables que cambió mi visión respecto a mi situación como mujer profesional y mi visión respecto de la situación de la mujer en nuestra sociedad, en general.
Tras aquel evento publiqué un artículo en el blog de Arquiknowmadas titulado «Arquitectas Imparables y Mujeres Imparables», que durante muchos meses fue el más visitado de mi blog…
Y realmente eso me hizo pensar.
¡Mucho!
Pensar y Reflexionar…
¿Realmente este tema era importante? ¿Era importante la situación de la mujer en el mundo de la arquitectura?
Después de muchos meses de reflexión y crecimiento personal…
De vivir de un blog muy relacionado con el mundo de los negocios de arquitectura.
De ganar poco a poco visibilidad y relevancia a nivel personal como profesional del sector y conocer, cada vez más, a muchas mujeres maravillosas que viven en el anonimato su día a día he llegado a la conclusión de que Sí.
¡Es importante reflexionar sobre la situación de la mujer en el mundo de la Arquitectura!
Sencillamente porque es importante reflexionar sobre el papel de la mujer en nuestra sociedad.
Además creo que es una responsabilidad que tenemos los que (mucha o poca) poco a poco ganamos alcance social.
Sin estridencias…
Desde mi posición personal intentando sumar y no confrontar…
Todo esto que te cuento fue el germen que me ha llevado a comprometerme a nivel personal con acciones enfocadas a la Visibilidad y Crecimiento de las Mujeres Profesionales de nuestro sector (y otros).
Colaboro activamente en asociaciones de mujeres empresarias y participo en todos los eventos que puedo que se enfoquen en la visibilización del talento y liderazgo de la mujer profesional.
Incluso mi socia María y yo hemos creado una comunidad… La comunidad Mujeres en RED.
Algo está cambiando. Así lo siento… y poco a poco se empiezan a ver brotes verdes…
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Para muestra un botón. Te dejo con la visión de distintas compañeras del sector, que desarrollan su actividad profesional en diferentes ámbitos, que han querido aportar su visión y reflexiones sobre cuál es la situación de la mujer en el mundo de la Arquitectura.
Su aportación es totalmente personal y libre. Contestan a a raíz de una serie de preguntas que les planteé como punto de partida:
Te invito a hablarnos de tu trabajo. ¿Por qué eres Arquitecta? ¿De qué te sientes más orgullosa a nivel profesional?
¿Alguna vez han minusvalorado tu trabajo por el hecho de ser mujer?
¿Crees que el hecho de ser mujer puede llegar a frenar tu desarrollo profesional?
¿Crees que existen obstáculos relacionados con el género que te impiden impulsar tu carrera como profesional del mundo de la Arquitectura?
¿Exite un techo de cristal?
¿Has tenido alguna experiencia relacionada con esto?
¿Crees que la Arquitectura es un mundo de hombres?
¿La idea de la maternidad o el hecho de ser madre influyen en tu visión sobre cómo ejercer tu profesión? ¿En qué medida?
¿Te has planteado alguna vez dejar de ejercer tu profesión?
María Latre
www.marialatrearquitectura.com
Para mí el hecho de ser mujer y la idea de la maternidad influye de forma contundente tanto en nuestra vida personal, como en la vida profesional.
Considero que la arquitectura siempre ha sido una profesión tradicionalmente masculina, pero tengo que matizar que en mi generación de arquitectos jóvenes la profesión es cada vez más paritaria, algo que se puede constatar ya desde las escuelas de arquitectura, donde la presencia femenina es proporcional entre los alumnos. No tanto así en el ámbito de los profesores, dónde la presencia de la mujer profesora o doctora, se reducía notablemente.
Como anotación diferencial, las asignaturas “más relevantes” de la carrera eran impartidas por hombres. Ahí el techo de cristal es evidente.
Mi experiencia personal y al decidir estudiar arquitectura relativamente ”tarde” (anteriormente estudié FP y estudios superiores en Diseño de interiores), tras todos los años de ardua carrera y luego la búsqueda de mi propio camino a la hora de ejercer la profesión, me ha llevado a una situación en la que la sociedad actual me aboca a decidir si quiero evolucionar como arquitecta o decidir ser madre. Y subrayo decidir porque hoy en día, para mí la conciliación laboral es una utopía. Por lo que es una decisión vital personal pero influye decisivamente en evolución profesional.
Como emprendedora y mujer, la maternidad es un hecho que siempre está presente en todas las decisiones y sientes que de una forma u otra tienes que elegir, si apostar por tu profesión y progresar o si decides ser madre, correr el riesgo de estancarte e incluso perder todo lo que has conseguido, y esto no les ocurre a mis compañeros hombres.
Personalmente, creo que queda mucho por hacer y por conseguir en este aspecto para que realmente el ser mujer no condicione a la hora de prosperar en la carrera profesional.
Patricia Huerta
www.estudioarteyvida.com
En mi caso lo tenía clarísimo desde que tenía 10 años de edad quería ser arquitecto y no arquitecta… ¿el porqué? Esa es la cuestión… ya que en mi familia no tenía nada que ver con el mundo de la arquitectura o de la construcción. Siempre he sido una persona mucho más madura de la edad que tenía, disciplinada, responsable y recuerdo que tenía idealizada a la figura del arquitecto, como persona interesante, respetada como profesional, para ganar dinero y tener un gran estilo de vida… ¿nada que ver, no?
Desde pequeña me encantaba hacer mis refugios, me metía debajo de la mesa y con unas mantas o manteles realizaba ese pequeño cobijo, donde yo dejaba entrar a quien quería…la sensación era maravillosa.
Con lo que después de hacer la selectividad, currarme la nota durante mucho tiempo…me quede a las puertas de entrar en la universidad que quería…vaya decepción…pero bueno, me recupere y entré en la que hoy pienso que fue mi escuela de vida…y que después de 10 años en el mundo profesional añoro todavía.
Salí al mundo en la mejor época con la crisis del año 2008, y me volví a mi ciudad Cuenca, donde la verdad no me ha faltado el trabajo. Me dieron la oportunidad de montar el departamento de arquitectura en una empresa de ingeniería en que pude ver la dura y cruda realidad…yo venía del mundo del diseño…y eso no siempre se consigue…pero siendo positiva como nunca había conocido época buena…todo me parecía interesante, tenía tantas ganas de aprender…y aprendí a ver la profesión desde una manera diferente, mucho más pragmática, económica.
Poco después monte mi estudio de arquitectura en mi ciudad. Nunca he perdido la ilusión y ganas de poder hacer, sentir y comunicar la arquitectura desde mi punto de vista, de poder enseñar a descubrir la emoción que yo siento en los espacios, y de como esos espacios pueden llegar a cambiar las vidas, a hacerles más felices. Creo en el pequeño detalle que es el que marca la diferencia en la vida cotidiana de la personas.
Sé que es un mundo de hombres y que viene de una tradición patriarcal y por eso en mi interior subconsciente intento demostrar más por ser mujer, intento demostrar lo que valgo en cada proyecto en que me involucro, en que puedo con todo y no me permito disfrutar de algunos momentos. Es un trabajo duro en el que parecen que hoy las distancias se reducen cada vez más, pero lo consiguiríamos, sí lo que nos marca la diferencia con el hombre, que es la acción biológica de dar vida ,que es propia de la mujer, y la de cuidar a los hijos, fuera una cuestión de pareja…una cuestión de dos, en el que la baja o la excedencia o la reducción de jornada, se pudiera pedir indistintamente por parte de ambos… y no hablo de legislación sino de mentalidad.
Es difícil y me está resultando duro, en mi caso directora y arquitecto de un estudio pequeño de arquitectura, montar mi familia, ya que empresaria, mujer y arquitecta no es la combinación más rica del mercado, y por lo tanto estoy trabajando para poder conseguir un equilibrio laboral, maternal y mental que es muy importante.
Me siento orgullosa de poder disfrutar de las experiencias que te ofrece la vida por ser mujer, me siento orgullosa de toda la lucha que han realizado las mujeres por una igualdad, y por eso ahora podemos disfrutar de ello, podemos tener nuestra propia cuenta corriente…y me siendo orgullosa de lo que con esfuerzo y tesón voy consiguiendo día a día. Nos queda mucho por conseguir y habrá que luchar, cada una a su escala, por lograrlo.
Elena de Frutos
www.diariodeunaarquitecta.com
EL PODER DE LAS CREENCIAS.
Ser mujer, arquitecta y estar al borde de los 40 años sin haber formado una familia aún, al menos merece un balance de vida y prioridades.
Recuerdo que en segundo año de carrera nos pidieron comenzar a realizar unas visitas de obra, y detallar pequeños informes de construcción de los diferentes tipos de cubiertas.
Generalmente íbamos una amiga y yo, hasta que un día un compañero se nos unió. Se quedo literalmente flipado de lo bien que nos trataban.
“Esto os pasa porque sois tías. A mí nunca me dejan entrar ni me dan tantas facilidades”
Desde entonces siempre me he sentido una privilegiada de ser arquitecta y mujer.
En mis años cómo arquitecta expatriada en África siempre sentí ventajas por ser mujer, tanto a la hora de revisar la obra, como de negociar o exigir cambios, incluso en los momentos de tratar con los altos cargos del país.
Simplemente tengo la creencia de que me tratan bien y lo tengo más fácil.
El frenazo en mi vida llega en el momento de enfrentarme con la decisión de ser madre, apurando el reloj biológico al máximo.
Nunca lo tuve claro, por lo que he tenido la suerte de no sufrir la presión hasta el último momento. Pero llegado a este punto…
Ahora sí que creo que existe una limitación obvia y física.
Si quiero ser madre he de frenar mi carrera profesional y apostar por ello.
… y llegados hasta aquí, con todo lo explicado ¿no se tratará tan sólo de una nueva creencia?
Espero poder comprobarlo en breve y sacar alguna conclusión de ello.
P.D. Después de más de un año de parón en diario de una arquitecta, en breve espero ponerlo a caminar de nuevo. Si quieres nos vemos por ahí…
Eva Chacón.
www.bonsaiarquitectos.es
«Hemos heredado una sociedad llena de desequilibrios de orden social, económico y medioambiental, de ahí que el gran reto que nos ha tocado vivir en los tiempos actuales tenga que ver con re-equilibrar, que es al fin y al cabo la esencia de la “sostenibilidad”.
Personalmente, estoy convencida de que el factor clave que nos está encaminando hacia un futuro esperanzador para todos se encuentra en la activación en todos los niveles de influencia de la mujer equivalente a la del hombre. La revolución que está ocurriendo en el sector de la construcción en particular (y en el mundo en general) es consecuencia de la progresiva activación de la dimensión femenina, invisibilizada durante siglos. Y me refiero a una dimensión femenina integradora, que está rompiendo con la zonificación de territorios y espacios, con la obsoleta dualidad rosa/azul…dando paso a una sociedad donde el énfasis está en la persona en toda su riqueza y complejidad.
En mi estudio nos tomamos con gran sentido del humor la clásica caricatura del arquitecto excéntrico vestido de negro dibujando un garabato -llámese croquis- de una tumba de hormigón armado insensible con el entorno natural, creyéndose dios por hablar en un meta-lenguaje ininteligible para el común de los mortales. Y lo que es peor: la de la mujer arquitecta que imita este modus operandi cuando todo esto es más una herencia que no tiene nada que ver con nosotras. No es sólo que se nos vea así desde fuera, es una imagen que desde la profesión parecemos empeñarnos en fomentar. Y un síntoma claro de la decadencia de nuestra profesión tal y como la hemos heredado. De la necesidad urgente de reinventarnos.
La mujer arquitecta ha potenciado durante décadas su dimensión masculina para poder ejercer la profesión en un mundo de hombres. Pero ahora lo que está ocurriendo es que también ellos están descubriendo que la clave está en liberarse del corsé de arquitecto egocéntrico, dejando atrás la obsesión por la competencia, abriéndose a una mayor colaboración entre compañeros y ofreciendo un servicio basado en la empatía hacia los clientes y usuarios, todas estas cualidades propias de la dimensión femenina de la persona.
En mi caso, tengo la fortuna de experimentar el ejercicio de la profesión desde esta visión dual, ya que Luis Llopis y yo somos una “pareja total”: socios en la vida personal y profesional. El fenómeno “arquitectos en pareja” es realmente muy interesante ya que responde de forma natural a la necesidad del equilibrio entre la visión femenina y masculina a la hora de proyectar la arquitectura. Desde este punto de vista, el hecho de que en nuestra profesión sea tan frecuente encontrar estudios dirigidos por parejas de arquitectos no es nada casual.
Estoy convencida de que las arquitectas somos clave en la reinvención de nuestra profesión y de la arquitectura en sí misma. Integrar la perspectiva que las arquitectas tenemos como mujeres y como madres es clave para cambiar no sólo la imagen obsoleta que se tiene de los arquitectos y de su función en la sociedad, sino la configuración misma del ecosistema urbano.»
Denys Reyes
www.denysreyes.com
¿Por qué eres Arquitecta?
Soy arquitecta porque desde muy joven me gustaba dibujar los interiores de las casas, hacia planos sin tener idea de lo que significaba cada cosa, probé varias carreras antes que la arquitectura. En mi ciudad ( Valencia, Venezuela) no existía la profesión en ninguna universidad, hasta que, en la que estaba estudiando abrieron la carrera y sin dudar me cambié a mitad de semestre de ingeniería industrial. Acabé graduándome en la primera promoción, donde de 100 solo nos graduamos 13. Desde ahí ha sido una total aventura entre planos, obras, materiales, proveedores, ingenieros y un sin fin de ideas y propuestas acabadas y a la vez sin terminar.
¿De qué te sientes más orgullosa a nivel profesional?
Me siento orgullosa de todo el aprendizaje que me han dejado las distintas carreras que he estudiando y sigo haciendo, siendo todas de diferentes ramas he podido unificar todo lo que me gusta en un solo proyecto: el diseño, el marketing digital, la marca personal y ahora el coaching. Declarándome aprendiz para el resto de mi vida, una declaración que solo me abre posibilidades para seguir creciendo y disfrutando mi vida profesional. Ha sido un proceso bastante duro, en la universidad no nos enseñaron a sobre llevar los fracasos, ni los triunfos y todo esto pega cuando no se esta preparado, la verdad nunca se estamos preparado para estas cosas, lo cierto es que ahora después de dar tantas vueltas estoy enfocada en un proyecto personal que me permite seguir en contacto con colegas del mundo del diseño pero esta vez para acompañarles en el proceso de crear una marca profesional auténtica y creativa, como la arquitectura misma.
¿Crees que el hecho de ser mujer puede llegar a frenar tu desarrollo profesional?
Ahora mismo no lo creo pero quizás en otro momento en el pasado, podría decirte que sí, sobre todo para trabajar en obras, que era algo que me gustaba cuando vivía en Venezuela. Siendo mujer en obra, no era vista con mucha fortaleza, aunque me dibujara la cara de seria ( jejeje) . Lo cierto es que ahora, cada vez más, las mujeres nos estamos empoderando entre nosotras mismas y esto si que nos fortalece para emprender y ser las dueñas de nuestra propia empresa. Los tiempos cambian y nosotros evolucionamos de la misma manera y aunque sigamos teniendo obstáculos por genero, a la par se junta la valentía, el coraje y la pasión de la mujer profesional y emprendedora para florecer en un mar de hombres.
¿Te has planteado alguna vez dejar de ejercer tu profesión?
Me he reinventado y he creado mi propio negocio con todas mis profesiones,. Ya no ejerzo de arquitecta (los hombres aquí no tuvieron nada que ver) pero sigo involucrada de alguna manera con el diseño. La vida me ha abierto otros caminos que he elegido transitar y descubrir para aprender. Nunca dejaré de ejercer porque me encanta estar activa en el mundo laboral y ahora mas en el mundo digital, a lo que puedo decir que estoy satisfecha por como ha sido mi trayectoria profesional, lo dije mas arriba, todo siempre es un aprendizaje y eso es lo que mas valoro.
Elvira Carregado Pazos
Vocal de la Xunta de Goberno del COAG
Representante del colectivo HaiMulleres
AVANZANDO…
No recuerdo lo que me llevo a ser arquitecta, en aquel momento con 18 años, era una opción que se mezcló con alguna otra. No pensaba que fuese una profesión masculina, y lo era. Incluso en la escuela, éramos sólo el 15 %, pero sinceramente no lo notábamos, o quizás sí pero de modo muy puntual. Ni siquiera nos parecía entraño que la gran mayoría de los profesores fuesen hombres. En mi recuerdo quedan tan sólo unos pocos nombres de mujeres: Pascuala, Miriam, Julia… y Rosa de matemáticas.
A la vida laboral, llegas con muchísima fuerza, pero las cosas son diferentes, trabajas más, porque consideras que tienes que demostrar algo que a otros se le supone… lo consideras tu y así lo sienten muchos de los demás. Pero mi sensación es que el trabajo se valora como el de un profesional, sin matices de género, que no se infravalora por el hecho de ser mujer. Y es así hasta que eres madre. Entonces todo se resquebraja empiezan a dudar de ti, no de tu capacidad de trabajar pero si del hecho de que tu trabajo sea lo prioritario, pues te vas a preocupar más de tu hijo y no lo vas a hacer todo lo bien que deberías. Este es el momento en que muchas decidimos frenar. Dejas de asistir a reuniones de horarios imposibles, te coges un rato para acompañar a tu hijo, decides que los fines de semana no son para rematar proyectos… no asistes a algún curso a pesar de que te interesa mucho…
Y me faltan los techos de cristal con esa idea que se repite: No estamos porque no damos el paso, o sea, porque no queremos. Puede… pero entonces habrá que pensar porqué ocurre, y si como sociedad queremos cambiarlo, o si simplemente no importa que la arquitectura sea, o parezca que es, cosa de hombres.
Brydma Bravo
www.brydmabravo.com
Mil gracias por la invitación Paula, por generar espacios para empoderarnos como mujeres.
Vanesa Ezquerra
www.vanesaezquerra.com
¿Por qué eres Arquitecta?
Porque desde que pequeña, lo quise. la culpa la tiene una Pelicula de Paco Martinez Soria, ( no se su título ) donde un hijo suyo, estaba estudiando arquitectura, y sale una secuencia haciendo un examen verbal con el dibujo de una iglesia renacentista detrás ….. ahi, dije » yo quiero ser arquitecto», y hasta ahora….
¿De qué te sientes más orgullosa a nivel profesional?
De ayudar a las personas a vivir en espacios confortables, y saludables. De dar todo lo mejor de mí, para mejorar sus vidas .
¿Alguna vez han minusvalorado tu trabajo por el hecho de ser mujer?
A la cara, no lo recuerdo. Yo soy de esas personas, que olvido lo malo y siempre me quedo con lo bueno. Después de casi 20 años de profesión, sino, estaría amargada.
¿Crees que el hecho de ser mujer puede llegar a frenar tu desarrollo profesional?
Creo que todavía, las personas al pensar en la imagen de un arquitecto (siguen visivilizando la imagen masculina). Y esto, pesa a la hora de ganarte la confianza de tu posible cliente.
¿Crees que existen obstáculos relacionados con el género que te impiden impulsar tu carrera como profesional del mundo de la Arquitectura?
No estoy muy segura. Pero, desde luego, en todas las profesiones tradicionalmente masculinas, los hay, así que seguramente en esta también.
¿Existe un techo de cristal?
No lo sé, pero creo el problema es el propio techo que nos ponemos nosotras.
Según las ultimas encuestas, todavía el 60% de las mujeres, anteponen la familia a su carrera profesional a la hora aceptar una promoción profesional, dado que todavía el peso de la gestión y cuidado de la familia, sigue recayendo, mayoritariamente sobre nosotras.
¿Has tenido alguna experiencia relacionada con esto?
Directamente no, pero como Presidenta de las Empresarias Palencia, estoy en contacto con situaciones y estadísticas que verifican esta reflexión.
¿Crees que la Arquitectura es un mundo de hombres?
Creo que ningún mundo debería ser » de hombre». Bien es cierto, que la mujer se ha incorporado al mundo de la arquitectura en la ultima treintena, parece que sigue siendo un mundo de hombres. Sobre todo cuando pasa a la esfera pública. Solo tienes que ojear las revistas y los premios de arquitectura….. ahí, la presencia femenina es casi inexistente.
¿La idea de la maternidad o el hecho de ser madre influyen en tu visión sobre cómo ejercer tu profesión? ¿En qué medida?
En ese aspecto, poco te puedo ayudar, dado que no soy madre.
¿Te has planteado alguna vez dejar de ejercer tu profesión?
Nunca. Es mi vocación y soy feliz cuando estoy investigando, diseñando un proyecto o escribiendo un artículo para mi blog, sobre el passvhaus. Mi pasión.
Silvia Díaz Hernandez
www.silviadiazhernandez.com
Mi forma de ver de la arquitectura está vinculada a las emociones y a cómo interacciona la gente con los edificios. De hecho todo surge de mi primer viaje a Italia, con quince años, donde sufrí un síndrome de Sthendal de una semana no sólo en las catedrales, sino en las tiendas, en los cafés, en las plazas… Ese es el origen de mi interés por el interiorismo emocional. El interiorismo Montessori vino después, con la maternidad.
Estoy muy orgullosa de no haber hecho nunca un proyecto en el que no creyera, ni trabajado nunca para nadie en quien no creyera, aunque eso no significa que no me hayan decepcionado.
Trabajando con compañeros mayores y otros trabajadores me he encontrado con cierto paternalismo algunas veces, quizá asociado a la edad, pero nunca con falta de respeto.
Donde sí he notado la discriminación es en las entrevistas de trabajo. De hecho he tenido varias entrevistas en las que me han preguntado a bocajarro si tengo hijos, si tengo pensado tener hijos, qué horario tienen mis hijos en el colegio, quien se queda con los niños si se ponen enfermos… Cosas que estoy totalmente convencida que jamás le preguntarían a un hombre de mi edad. Creo que esto no es específico de la arquitectura sino que en general la empresa es un mundo de hombres en el que la maternidad está muy infravalorada.
Estuve unos años desvinculada de la arquitectura y me dí cuenta de que en las empresas en las que la abrumadora mayoría del personal es femenino, y la gerencia son mujeres, las cosas funcionan de otra manera, así que hay esperanza también para nuestro sector.
Es por eso tomé la decisión de emprender en solitario, aunque sigo colaborando con otras empresas, y reconozco que tampoco es fácil conciliar trabajando para mi misma. Pero es mi apuesta de futuro y creo mucho en lo que estoy haciendo.
SERVICIO DE CONSULTORÍA DE ESTRATEGIA DIGTAL PARA ARQUITECTOS
¿Te falta Claridad sobre la estrategia más adecuada para tu negocio de arquitectura?
Te propongo empezar por realizar un DIAGNÓSTICO para que puedas empezar a impulsar tu Negocio de Arquitectura desde la CLARIDAD y el FOCO.
Reflexiones Arquiknowmadas sobre Mujer y Arquitectura.
Ya en su día te emplazaba a ver el famoso documental Arquitectas. En este documental, realizado por la también arquitecta Ariadna Cantis, diez compañeras (Izaskun Chinchilla, Blanca Lleó, Almudena de Benito, Eva Gil, Liliana Obal, Maria Buey, Isabel Sanchez, Carmen Espegel, Carolina Gonzalez Vivesnes y Sánchez de Madariaga) aportan su testimonio sobre su condición de mujer y, a la vez, profesionales del mundo de la Arquitectura y de qué forma se desenvuelven a nivel profesional en ese ámbito.
Si nunca lo has visto. Te invito a que dediques unos minutos al documental…
Si tuviera que elegir una palabra me quedaría con «Revelador»
¿Y qué pasa contigo Paula?
Considero que a lo largo de toda mi vida profesional he sido enormemente afortunada. Me siento una privilegiada en lo relativo a mi vida laboral. Desde que terminé la carrera en el año 2000, he tenido la suerte de no haberme sentido discriminada por el hecho de ser mujer. Salvo algún comentario como el del principio del artículo y algún consejo (bienintencionado) que me recomendaba hacerme funcionaria para que fuera más fácil la crianza de los niños… no he sentido que el hecho de ser mujer torpedeara mi desarrollo como profesional.
Ahora bien. La capacidad de crecimiento a nivel laboral de la mujer, su capacidad de ascenso, y su evolución como profesional se ve muchas veces cohartada por situaciones relacionadas con la maternidad y la crianza de los hijos.
Ese es mi caso. Yo decidí reinventarme porque llegó un momento en mi vida en el que no me vi con fuerzas para liderar en solitario un estudio de arquitectura de los tradicionales…
Mi situación como madre de tres niños y el hecho de tener que afrontar su crianza en solitario ha condicionado totalmente mi vida profesional.
No vi soluciones factibles en su momento a la hora de buscar un trabajo.
Yo necesitaba y quería libertad y todo ello me llevó a tomar la decisión de emprender.
Pero reconozco que «ese», precisamente, ha sido el mayor regalo que he recibido en mi vida.
Estar al frente de un negocio digital, de hecho, me otorga tal libertad que yo siempre busqué (aunque durante muchos años no fuera consciente de ello).
Soy mujer y Arquitecta. Ahora lo digo sin rubor y sin añorar que el término acabe en «o».
Vivo de forma consciente mi vida y soy dueña de mi propio destino. «Soy Arquiknowmada».
Soy yo la que decido cuándo trabajo, y por supuesto, lo que cobro, y con quién lo hago.
¡Soy Libre!
Creo que todo profesional, y todavía más importante, toda mujer debe de tomar conciencia de lo relevante que es dar un paso al frente y posicionarse como profesional.
La sociedad no se puede permitir prescindir de la mitad de los miembros que la componen.
Las mujeres debemos poco a poco ser más activas y asumir y aceptar que podemos desarrollar un un papel protagonista en esta nueva era.
Estamos ante un nuevo escenario empresarial.
Es responsabilidad de todos y todas: administraciones, empresas y profesionales, (hombres y mujeres) contribuir a reconocer y visibilizar el trabajo de la mujer en general, y por su puesto, en nuestro caso en el mundo de la arquitectura en particular.
No creo que esta nueva situación se tenga que desarrollar desde la confrontación de género, sino desde la educación de las nuevas generaciones, el desarrollo de políticas activas y desarrollando nuevas vías de cooperación entre hombres y mujeres.
Tod@s debemos ser bienvenidos. Hombres y mujeres. Colaboremos juntos en aras de crear una sociedad más justa y mejor en la que todos y todas tengamos las mismas oportunidades.
Un abrazo muy fuerte a todas esas ArquitectAs Imparables, de esta humilde Arquiknowmada.
Me encantaría conocer tu opinión así que te espero en los comentarios del blog…